Llevamos muchisimo tiempo en este mundo extraño y complejo de la adopción, en concreto y luchando por hacer realidad nuestro sueño de ser padres, Eduardo y yo llevamos desde principios del 2006 forcejeando con burócratas y funcionarios de todo tipo, hemos sufrido los constantes cambios de directrices en países y requisitos, cuando empezamos con China nos aseguraron una espera de 9…luego 18….21 no mas de 24,36 meses y hoy tres años después aun parece que faltan otros tres para que nos toque ser asignados… por lo que abrimos un segundo expediente para Kazajstán en noviembre del 2007,con el que hemos tenido que sufrir el olvido consular durante un año y mientras tanto hemos sufrido circunstancias familiares muy serias de enfermedades que han tenido soluciones felices…
En ningún momento cejamos en nuestro empeño de ser padres y nunca dejamos de resistir ese pulso con la burocracia e incluso tuvimos que renovar el CI y no como un mero trámite, sino como un nuevo examen exhaustivo para obtener el permiso para poder ser padres, esta vez pedimos agrupación de hermanos.
Ha sido muy duro -el proceso en general y nuestras circunstancias en particular- y por supuesto que aun no ha acabado, pero toda esta reflexión la hago como prólogo al momento mas esperado: El viaje al país de los sueños el próximo día 8 de Octubre viajaremos a kaz a Ust-kamenogorsk y conoceremos a los que, si todo va bien, serán nuestros hijos.
Es lo especial de la adopción, esta información es nuestro embrión, el que empieza a desarrollarse en nuestro corazón y desde el momento que sabes que existe ya lo proteges y le quieres, porque desearlo lo llevas deseando muchísimo tiempo, tod@s l@s que estáis aquí lo sabéis: ¡nuestros hijos son los mas deseados y esperados del mundo! Pronto veremos sus caritas, ya tenemos los billetes y hemos empezado a hacer las maletas, parece ser que hará mucho frío en el mes que pasaremos en Ust-kamenogorsk… pero también creo que nuestros corazones van a experimentar una calidez que ni podemos imaginar, los que ya lo habéis vivido lo sabéis y no recuerdo ninguna queja seria del frío pasado, sea como fuere hay un curioso fenómeno este otoño y es que hay miles de mariposas revoloteándonos en el estómago. Ya estamos descontando los días, impacientes, nerviosos e ilusionados ¡falta tan poco y a la vez nos parece tanto tiempo!...